Montaje de fotos de Enrique Ponce y Ana Soria con rostros serios

Los 700.000 euros que separan a Ana Soria de Enrique Ponce

La familia de Ana Soria trata de desprenderse sin éxito de una propiedad inmobiliaria

Ana Soria ha comprobado como la situación económica obligaba a Enrique Ponce a tomar medidas drásticas. El torero puso en alquiler una de sus propiedades más preciadas, la finca Cetrina, que se ofrece para acoger bodas por 5000 euros.

No estaba por la labor, pero las continuas pérdidas de dinero le han llevado a hacerlo. Desde hace tiempo se le venía pasando por la cabeza esta posibilidad, pero fue ahora cuando se decidió ponerla en el mercado.

De problemas de patrimonio inmobiliario también sabe mucho Ana Soria. Su familia lleva un año intentando deshacerse de un chalé que tienen en Almería, pero de momento no han encontrado interesados.

El pasado invierno decidieron poner a la venta dicha propiedad, pero desde entonces no han recibido ninguna oferta que les satisfaga. El precio por el que se puede adquirir es de 700 000 euros, señala El Español. Esta cifra de salida no se ha movido durante los últimos doce meses, por lo que no parecen muy dispuestos a negociar.

Hay que decir que viviendas similares y en esa misma zona tienen un valor mucho más bajo. Si a esto se le une la poca predisposición de la familia para rebajar el precio actual, las opciones de darle salida son escasas.

Ana Soria paseando por la calle
La familia de Ana Soria trata de vender su casa | GTRES

La agencia inmobiliaria encargada de gestionar la venta hace todo lo posible por encontrar nuevos compradores. Actualizan con regularidad los anuncios en portales de venta como Idealista, además de organizar visitas. También han ido cambiando las fotografías en su web oficial con el objetivo de captar la atención de posibles interesados.

Es la única solución que encuentran ante la postura inamovible de la familia de Ana Soria con el precio de la casa. También puede darse el caso de que no tengan demasiada prisa en desprenderse de ella. Eso les llevaría a aguantar el tiempo que hiciera falta con tal de conseguir su propósito.

El inmueble se localiza en Ciudad Jardín-Tagarete, muy cerca del paseo marítimo de la ciudad. Cuenta con 260 metros cuadrados y dispone de cuatro plantas. Nada más entrar en la casa encontramos un recibidor, mientras que al fondo se aprecia una cocina de gran tamaño.

Enrique Ponce y Ana Soria con rostros serios
Ana Soria sigue muy pendiente de Ponce | GTRES

Desde esta estancia se puede acceder a un patio interior, en donde se puede disfrutar del buen tiempo de la zona. Uno de los puntos fuertes de la vivienda es el salón, con chimenea y un par de sofás. A su lado está el comedor, con capacidad para hasta ocho personas.

En la primera planta tienen tres habitaciones y un par de baños, mientras que en la segunda hay otro dormitorio y una amplia azotea. Desde este lugar se pueden apreciar unas maravillosas vistas de la zona. Por su parte, en el sótano disponen de un espacio para el ocio, en donde no falta de nada.

Ana Soria continúa con su vida con total normalidad

Ana Soria, mientras tanto, trata de llevar una vida lo más tranquila posible. El pasado verano decidió tomar una decisión muy inteligente y abandonó las redes sociales después de una época de mucho revuelo mediático. Era habitual que compartiera en ellas imágenes con Enrique Ponce.

Pero recientemente ha vuelto a realizar una incursión por estas plataformas. Fue a través del perfil de una amiga, que decidió compartir una imagen en la que aparece la novia del torero con otras cuatro chicas. Se trató de un encuentro entre amigas en un restaurante y quisieron inmortalizar el momento.

Foto de Ana Soria junto a sus amigas
Ana Soria junto a sus amigas, en una imagen que compartieron en redes sociales | Instagram

En las últimas semanas se había especulado con la posibilidad de que la pareja estuviera atravesando por una pequeña crisis. Pero no hay ningún motivo que lleve a pensar eso. Siguen estando juntos y cada vez más enamorados.

Ana Soria ha demostrado estar al lado del torero en los buenos y en los malos momentos. Así se comprobó hace poco cuando le acompañó a los juzgados de Madrid por una demanda de un mozo de espadas.