El pasado siempre vuelve y sino que se lo digan a Lydia Lozano. Ni en sus peores pesadillas podría haber imaginado que el caso Ylenia volvería a reabrirse. Sálvame ha presionado durante las últimas semanas a Lydia para que revele la identidad de la fuente que la llevó a viajar a República Dominica para investigar si la hija de Al Bano seguía viva.
Sálvame sabe que estos temas enganchan a la audiencia, por esta razón, este sábado se sentará en el Deluxe Mikel Barsa, ex representante de Al Bano para someterse al polígrafo. El programa esperaba que la periodista esté presente en su puesto de trabajo, pero la canaria ha tomado una drástica decisión.
Al enterarse de que el exrepresentante del cantante italiano será el entrevistado estrella de la semana, Lydia se rompió y en una pausa publicitaria llamó a la dirección de Sábado Deluxe'. El motivo de la llamada tenía un único motivo, pedir a la dirección de 'La Fabrica de la Tele' no estar presente en la entrevista en la que volverán a aparecer todos los fantasmas del pasado.
Sin embargo, la directiva de Sábado Deluxe quiere que Lydia Lozano si esté en el plató de Telecinco, ya que la presencia de 'la reina del chuminero' en una entrevista sobre Ylenia Carrisi es un ingrediente fundamental.
Carlota Corredera le preguntó a Lydia el motivo de esta decisión y ella estalló en lágrimas. «He llamado a Patricia para decirle que mañana no quiero estar. No entiendo como nadie se pone en mi piel... Deberíais entender que mañana me quede en mi casa», dijo la canaria en plena crisis de ansiedad.
Charly quiere que abandone Sálvame
El marido de Lydia Lozano harto de Sálvame ha dado un golpe en la mesa y le ha pedido a su mujer que abandone el programa. Lydia lo contaba ayer durante la conducción del programa: «Me da igual lo que pasó en 2005, nunca he dicho nada y no porque sea el 2020 lo voy a contar todo. No quiero hablar, no me importa, me da igual», ha dicho entre lágrimas, con la voz entrecortada y sin poder respirar bien superada por la situación.