Ernesto de Hannover en un primer plano

Pillados por Madrid: la extraña pareja surgida el verano en Ibiza

Ernesto de Hannover da una nueva oportunidad al amor de la mano de Claudia Stilianopopulos, hija de Pitita Ridruejo.

Parecía imposible que Ernesto de Hannover volviera a acaparar la atención mediática después de los sucesos acontecidos en los últimos meses. Pero lo ha conseguido. Y es que el exmarido de Carolina de Mónaco ha acaparado la portada de ‘¡Hola!’ este mismo miércoles con un nuevo amor.

Su nueva ilusión no es nada más y nada menos que Claudia Stilianopopulos Ridruejo, hija de la célebre escritora Pitita Ridruejo.

La pareja ha sido cazada a finales de este mismo mes de septiembre junto al hotel Wellington de Madrid. El ex de la princesa monegasca paseaba por la noche junto a su nueva acompañante, aunque no sabemos hacia dónde se dirigían.

Las fotografías llegaron hasta la redacción del periódico ’20 minutos’. Los testigos, por su parte, aseguraron que la complicidad entre ambos era evidente.

Además, mientras hacían una pausa en la calle Velázquez, no podían disimular lo bien que lo pasaban. Rieron y disfrutaron sin parar.

Pero esta historia de amor no ha nacido en los últimos días. Tras ser condenado a 10 meses en libertad condicional, Ernesto de Hannover ingresó en una clínica de desintoxicación en Austria. Un lugar que abandonó este verano para disfrutar de unas vacaciones de verano en Formentera.

Allí fue donde conoció a la hija de Pitita. El aristócrata se encontraba en la paradisiaca isla disfrutando de sus días libres en compañía de su hijo Christian y su esposa, Alessandra de Osma. Ambos llevan dos años en Madrid, haciéndose cargo de negocios y de sus dos hijos gemelos.

Las complicaciones de Ernesto de Hannover

Aunque Ernesto de Hannover haya optado por vivir una vida mucho más tranquila y en compañía de un nuevo amor, algunos asuntos del pasado le persiguen.

Y es que legalmente, sigue casado con Carolina de Mónaco. Contrajo matrimonio con la primogénita de Grace Kelly y Rainiero de Mónaco en 1999. Un enlace que tuvo como fruto a la hija de ambos, Alejandra.

Diez años después, decidieron poner fin a su unión como consecuencia de los escándalos a causa de la adicción de la bebida de Ernesto.

Pero esto tan solo es papeleo, ya que pese a estar todavía casados llevan muchos años sin hacer vida en común ni mucho menos acudir a eventos públicos juntos.

No obstante, sus rifirrafes familiares no quedan ahí. Ernesto está enfrentado con su primogénito, que no descansará hasta hacerse con el control de la fortuna del clan Hannover.

Su hijo mayor firmó un acuerdo en 2019 por el que entregaba el castillo de Marienburg, sede de la Familia Real de la Casa de Hannover, al estado germano. Lo hizo por la cantidad de 1 euro.

Una decisión que no gustó a su padre, que dio comienzo a una guerra familiar que a día de hoy sigue activa. De hecho, reclama alrededor de 5 millones de euros.

En esta disputa también están inmerseas la propia Carolina de Mónaco y su hija Alejandra, defendiendo sus intereses. Y es que la prensa alemana afirma que la hermana de Alberto de Mónaco habría hecho un pacto con los hijos de Ernesto. Este se basaría en negarse al divorcio para conservar el patrimonio familiar.

Pero estos roces familiares poco le han importado a Claudia Stilianopoulos. Conocida familiarmente como ‘Clo’, la artista y decoradora prefiere guardar en los asuntos d esu vida privada con la máxima discreción posible. Aunque sabemos que estuvo casada con Juan Garaizabal, con quien tuvo dos hijos.

Ahora que Ernesto parece estar plenamente recuperado de sus problemas de salud y adicciones, ha decidido dar una nueva oportunidad al amor. Y qué mejor manera de hacerlo que de la mano de Claudia.