Antonella Orihuela y su hija Esme

La familia de Esme, de 2 años y sola, pide ayuda tras matar su padre a su madre

Esme queda huérfana y su familia materna desea agilizar los trámites para que regrese a Argentina cuanto antes

Esme, hija de Antonella, la joven argentina asesinada por su esposo hace unos días en Sant Vicenç de Castellet (Bages), queda huérfana con 2 años. Ahora, los familiares de la Esme, que presenció el crimen de su padre a su madre, quieren recuperarla.

El hombre habría quemado a la mujer y posteriormente se habría ahorcado con el cinturón del coche. A día de hoy, los Mossos d'Esquadra siguen investigando este espeluznante caso.

Los tíos maternos de Esme piden que la niña pueda volver a Argentina. "Mi sobrina está completamente sola, sin familia, en una delegación de cuidado de la infancia en Barcelona".

"Nosotros estamos en contacto con la psicóloga que la atiende y nos hemos reunido con el cónsul. Pero, nos dicen que entre todo el papeleo pueden pasar quince días o tres meses. Necesitamos estar con ella lo antes posible", ruega Ezequiel Orihuela, hermano de Antonella, la joven asesinada.

"Antonella dejó de responder mensajes el jueves a las 11 de la mañana"

Su familia ha intentado agilizar los trámites para recuperar a Esme. Se enteraron del crimen tras varios días sin saber nada de Antonella gracias a Instagram. "Mi hermana dejó de responder mensajes el jueves a las 11 de la mañana", cuenta Ezequiel.

"Después de que mi hermano y yo escribiéramos en un grupo de WhatsApp familiar saludando -recapitula-, ella contestó con una pregunta que me resultó inquietante: '¿Ustedes hablan con Adrián?'. Ese día le escribí a su esposo a ver qué pasaba, me contestó normal y me mandó una foto de la nena durmiendo, a eso de las 18.30". Todo a punta a que a esa hora, Antonella ya había sido asesinada por su marido.

Varios testigos llamaron a la policía en diferentes ocasiones hasta que vieron un incendio. Los bomberos llegaron hasta allí y encontraron los restos de Antonella y, muy cerca, el vehículo con Adrián dentro y ahorcado. En el asiento trasero estaba Esme, con quemaduras en un brazo.

"Creemos que fue testigo de todo, incluso del asesinato de su mamá. Estaban en la casa porque tenían COVID-19 y porque, a pesar de las reiteradas denuncias por violencia, la obligaban a vivir bajo el mismo techo que su marido", apunta el hermano.

La pareja se había conocido en Argentina en 2011. Él se fue a trabajar a Barcelona en 2016 y un año después volvió para casarse con Antonella. El 1 de agosto de 2017 ambos se trasladaron definitivamente a España y hace menos de dos años nació la hija en común.

"Tenía la intención de quitarle la niña a mi hermana"

Ezequiel relata un episodio de malos tratos ocurrido durante la relación. "Tocó una taza en la que Adrián se estaba haciendo un té, se quemó y escuchamos los gritos del papá insultando a mi hermana, culpándola. Ella cortó la comunicación y nosotros nos quedamos muy preocupados pero sin poder hacer nada desde aquí", relata Ezequiel.

"Tenía la intención de quitarle la niña a mi hermana y ella sufrió violencia psicológica y verbal durante toda la internación. Ya en el domicilio, él agarró a Antonella del brazo, la empujó. Ella llamó a la policía, pero como no tenía heridas visibles, lo tomaron como un caso de violencia verbal", cuenta el hermano.

Antonella pidió que desalojaran a su marido, pero como la casa estaba a nombre de él, siguió viviendo allí. Además, Antonella debía seguir viviendo en la misma casa que Adrián porque si no hablaríamos del abandono de su hija.

"Ella lo denunció muchas veces por maltrato, en una semana la Policía fue tres veces. Solo una noche mi hermana y mi sobrina estuvieron en un refugio, a la mañana siguiente tenían que volver a su casa. Mi hermana no se podía ausentar sin decirle a él a dónde iba, era como si ella tuviera prisión domiciliaria", denuncia la familia.

En octubre de 2021 estaba marcada la fecha del juicio tras denunciarle por violencia de género, pero la semana pasada, la argentina fue asesinada. "Ahora incluso nos dicen que aquí todavía no llegó la confirmación oficial de la policía de que el cuerpo hallado es el de mi hermana".

"Todo se está demorando por temas burocráticos y papeleo y mientras los días pasan y mi sobrina sigue sola. Yo saqué el pasaporte para viajar en cuanto me digan, pero estamos totalmente trabados", sentencia el hermano.