Control de los Mossos d'Esquadra en una carretera catalana.

La policía ya sabe de quién es la mano encontrada en un maletero

El suceso ocurrido en Tarragona está más cerca de resolverse

La policía catalana ya está más cerca de esclarecer los hechos ocurridos esta semana en Tarragona, cuando la Guardia Urbana se topó con una mano dentro del maletero de un coche.

A diferencia de lo que muchos pueden pensar, no se trataba de ninguna prótesis de plástico, sino de una mano seccionada perteneciente a una persona fallecida. 

La escena, más propia de una película de terror que de la vida real, ha dado la vuelta al mundo y ha destapado un crimen que ha abierto una investigación policial.

De hecho, desde entonces, la principal prioridad de los Mossos d'Esquadra ha sido identificar a la persona presuntamente asesinada y esclarecer el móvil del supuesto crimen.

Aunque de momento todas las hipótesis continúan abiertas, los investigadores ya han podido localizar el cadáver de la persona a la que arrancaron la mano de la forma más macabra.

La policía identifica a la persona fallecida cuya mano fue encontrada en un maletero

Todo ocurrió durante la madrugada del jueves 26 de agosto en Tarragona, cuando los agentes dieron el alto a un vehículo. Se había saltado un cartel de dirección prohibida, cometiendo una grave infracción de tráfico que los agentes de la Guardia Urbana tenían que sancionar.

En el interior del coche, viajaban dos ocupantes que fueron registrados minuciosamente tras comprobar que ambos tenían antecedentes penales.

Durante el registro, los policías se llevaron un susto de muerte al encontrar una mano entre los bártulos del maletero. Drogas, dinero, armas, cualquier otro hallazgo hubiese sido más común para los agentes, que ante la situación avisaron inmediatamente a los Mossos d'Esquadra.

En ese preciso momento, ambos ocupantes del vehículo fueron detenidos junto a un tercer implicado por un presunto delito de homicidio.

Mientras todos ellos permanecían en los calabozos, los Mossos se hicieron cargo del caso y empezaron buscar posibles pistas en la vivienda de los detenidos. Allí encuentran sangre humana, aunque no obtienen ninguna otra prueba sobre la posible víctima.

La mano encontrada corresponde a un vecino de Tarragona

Finalmente, la policía ha podido localizar el cadáver de la persona presuntamente asesinada tras la confesión realizada por los tres detenidos.

Después de pasar dos días en la comisaría, los implicados condujeron a los agentes hasta el lugar donde habían ocultado el cuerpo sin vida de la víctima. Estaba a 80 kilómetros del lugar de los hechos, en un canal de riego del Ebro, y fue encontrado con aparentes signos de violencia.

El hombre presuntamente asesinado ya ha sido identificado y se trata de un joven de 23 años, vecino de Tarragona y de nacionalidad marroquí. En un principio se barajó que podía ser un ladrón conocido por la policía, pero fuentes cercanas han negado este hecho.

A pesar de que el misterioso caso parece estar cada vez más cerca de resolverse, todavía son muchos los hechos que se desconocen.

La mano encontrada podría servir como prueba del crimen, aunque falta por descubrir por qué los supuestos criminales guardaron la extremidad en el maletero del coche.

Un posible ajuste de cuentas

Según han barajado los investigadores, se podría tratar de una especie de aviso macabro para algunas personas vinculadas al tráfico de drogas. También se habla de un posible ajuste de cuentas y una amenaza directa para personas relacionadas con la víctima.

Por el momento, todas las hipótesis se mantienen abiertas y no se descartan más detenciones, aunque el caso permanece bajo secreto de sumario.

Desde el pasado domingo, las tres personas detenidas se encuentran en la cárcel con prisión provisional, incomunicada y sin fianza. Así lo ha decretado el juzgado de instrucción número 2 de Tarragona, a la espera de que se esclarezcan los hechos y se pueda celebrar un juicio.