Colada de lava desbordando el cono principal del volcán de La Palma

El volcán de La Palma se apaga de repente

Hace más de 24 horas que el volcán de La Palma no presenta ningún signo eruptivo

Parece que la gran pesadilla de los habitantes de La Palma ha llegado a su fin. Tras 88 días de erupción, el Valle de Ariadne, en La Palma, ha amanecido este miércoles sin signos de actividad eruptiva.

El Instituto Volcanológico de Canarias (INVOLCAN) ha dado la noticia que tanto deseaban los palmeros desde el pasado 19 de septiembre. La tasa de emisión de dióxido de azufre (asociada al proceso eruptivo) es muy baja, su valor inferior a las 5 toneladas diarias.

 

Esto es una gran noticia para los habitantes de La Palma, pues podría suponer el fin de la catástrofe que ha marcado de por vida la historia de su isla.

La tasa de emisión baja de dióxido de azufre supone que la emergencia volcánica está claramente atenuada, ya que el cráter no emite lava. Desde la noche el pasado lunes, no hay inflación del terreno y la sismicidad es baja. A pesar de ello, los científicos se mantienen en situación de prudente espera antes de dar por zanjada la erupción del volcán definitivamente.

Imagen de los Bomberos de La Palma pidiendo a los vecinos que se marchen de una zona destrozada por un volcán
El volcán de La Palma puede llegar a su fin | GTRES
 

"No podemos decir que nos encontremos ante lo que usted quiere y yo más que usted: que esto se acabe", ha contestado Miguel Ángel Morcuende, portavoz del comité técnico del Plan de emergencia volcánica de Canarias (Pevolca) ante la petición de los medios para que valorara los datos de los indicadores favorables de las últimas horas.

El experto recalca que hace tan solo dos días atrás la situación parecía calmada y, sin embargo, el lunes hubo "una importante fase explosiva" con eyección de cenziza y caída de bombas lávicas. Así pues, la actividad del volcán no desapareció por completo aunque la situación pareciera tranquila.

Por la presencia de dióxido de azufre, el lunes fue necesario un confinamiento domiciliario en todo el valle de Ariadne. A pesar de ello, la presencia de este componente ha mejorado a muy buenos niveles, hecho que llena de esperanza a los palmeros.

En estos momentos, el Valle está "profundamente tranquilo, sin ningún observable eruptivo: ni lavas, ni piroclastos ni terremotos reseñables lo cual es una excelente noticia", afirma Rubén López, el vulcanólogo del Instituto Geográfico Nacional (IGN).

Por su parte, INVOLCAN, ha señalado que en este momento "hace más de 24 horas que no existe tremor volcánico en Cumbre Vieja", aunque siguen vigilando "cualquier cambio en la actividad".

En este sentido, los expertos piden prudencia a pesar del inevitable optimismo, ya que no es la primera vez que el volcán experimenta un parón de actividad, pero posteriormente vuelve a reactivarse.