La policía investiga el extraño caso que rodea la muerte de Christy Giles, modelo y actriz a la que abandonaron en las puertas de un hospital en California. En otro hospital apareció también en estado crítico Hilda Marcela Cabrales-Arzola, diseñadora y amiga de Christy. Todo apunta a un caso de agresión sexual.
Los hechos sucedieron el pasado sábado por la noche, cuando el cuerpo de la modelo de 24 años apareció tirado ante las puertas del centro médico. Había salido de fiesta con unas amigas, entre las que se encontraba Hilda Marcela. La diseñadora apareció inconsciente en otro hospital, y se encuentra en muerte cerebral.
A las 12 de la noche, Christy dejó de dar señales de vida y apareció muerta a las cinco de la mañana frente al Southern California Hospital. Un vídeo registró el momento en el que varios hombres bajaron de un coche sin matrícula y abandonaron el cadáver. Dos horas más tarde apareció su amiga en otro hospital, intoxicada.
Qué pasó la noche del sábado
La pregunta que se hace ahora la policía es qué pasó aquella noche y con quién estuvieron las víctimas. Fuentes del entorno de Christy confirman que en las pruebas toxicológicas han hallado la presencia de heroína en su cuerpo. Según el marido de la modelo, “ellas no habían consumido nunca esa sustancia, no voluntariamente”.
Su principal hipótesis es que podrían haberlas drogado contra su voluntad, aunque falta conocer los resultados de la autopsia. El testimonio de otra de las amigas que estaba con Christy y Hilda también será fundamental para avanzar en la investigación. Las víctimas podrían haber sido objeto de un agresión sexual por parte de esos hombres.
'Vámonos de aquí'
La amiga de Christy y Hilda fue la primera en irse a casa, y según apunta la modelo y la diseñadora conocieron a algunos chicos estando de fiesta. Estuvieron en algunos locales del centro de Los Ángeles, y luego se fueron a un apartamento de la zona oeste. Queda por saber quiénes fueron esos chicos, y dónde está exactamente la vivienda.
Pero hay un detalle aún más inquietante. El marido de Christy tenía sincronizado su teléfono con el de su mujer por razones de seguridad, y ha podido acceder a los mensajes que envió aquella noche. Según ha desvelado, la modelo escribió a su amiga que se fueran de allí poco antes de morir: “Vámonos de aquí”.
El marido de la modelo se atreve a aventurar una hipótesis, y es que fueran víctimas de un “juego peligroso”. Una teoría a la que también apunta la madre Christy, Dusty, según la cual “las drogaron y las violaron antes de abandonarlas”. Un extremo que la policía, por ahora, no se atreve a confirmar ni desmentir.
Sabía ténicas de autodefensa
Christy Giles es hija de un exmilitar que sirvió en Irak, y que enseñó a su hija defenderse a través de técnicas de autodefensa. Por eso su madre se inclina a pensar que recibieron drogas para anular su voluntad. Eso explicaría los restos de heroína encontrados en su cuerpo, pero quedan más cosas por saber.
Por ejemplo, de qué murió Christy o si hubo agresión sexual. La única pista que tiene la policía son las imágenes de tres hombres enmascarados y vestidos de negro abandonando el cadáver en el hospital. “La única forma que tenían de mantener retenida a mi hija fue con drogas, quizás atándola”, asegura su madre.
“Creo que las drogaron para retenerlas con ellos y que probablemente las violaron”, afirma. El cadáver de Christy no presentaba signos visibles de autodefensa, lo cual corrobora esta versión. Hilda Marcela sigue ingresada en estado crítico, y los médicos apenas le dan opciones de sobrevivir.
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