Jesús Janeiro

Jesulín de Ubrique, ¿demasiada ambición?

Jesús Janeiro ha visto como su fortuna llegaba prácticamente al punto muerto

Jesús Janeiro, las ambiciones que han venido a menos

Jesulín de Ubrique con cara de sorpresa sentado y con un micro
Jesulín de Ubrique será padre próximamente | GTRES

 

Si hay un torero famoso en España es Jesulín de Ubrique. Nació en 1974 y en la década de los 90 se convirtió en el torero más popular del país. Compaginaba su intensa actividad como torero con su presencia habitual en la prensa del corazón de la época.

Jesulín ostenta el récord de toreros con más corridas en un año. En 1995 hizo 161, en 1994, 153 y en 1996, 121. El dinero llegaba a sacos a su casa y Jesulín era la estrella mediática del momento. 

Sacó incluso un disco, que incluía la conocida canción Toda y en 1999, con solo 25 años decidía retirarse temporalmente de los ruedos por falta de motivación.

Fue en 1995 cuando empieza su relación con Belén Esteban y su primera hija Andrea nace el 20 de julio de 1999 en Madrid. Belén y Jesulín se separaron poco después y hasta el día de hoy mantienen tensos enfrentamientos por el cuidado y manutención de su hija.

Después Jesulín se casó con María José Campanario con quien tienen dos hijos más, Julia y Jesús. La pareja espera un hijo para 2022.

La fortuna de Jesulín, que ya prácticamente no existe

Jesulín de Ubrique sonriente plano medio
Jesulín de Ubrique lo tuvo todo muy joven | GTRES

Jesulín de Ubrique ganó muchísimo dinero toreando. De él acabó viviendo prácticamente toda la familia y la millonada que facturaba tenía un destino: la finca Ambiciones, la joya de su patrimonio.

La finca tenía 300 hectáreas de terreno y cuenta con una espectacular mansión de 2.000 metros cuadrados. Tiene diez habitaciones, sala de juegos, gimnasio, plaza de toros, caballerizas e incluso capilla.

Actualmente, la familia ya no vive allí y ahora se alquila para eventos. De hecho se acusa a Humberto Janeiro, el padre del torero, de dilapidar la fortuna de su hijo, gastando sin freno y con decisiones empresariales erróneas.

Las sociedades que tiene el torero están en punto muerto y muchas de ellas con deudas. Ha vendido mucho patrimonio y si bien no pasa apuros para el día a día, parece que la situación actual del torero dista mucho de los éxitos y la abundancia de tiempos pasados.