Plano medio de Terelu Campos con mascarilla y bolso en el brazo andando por la calle

'Intentan difamarme': Terelu Campos dice basta a sus detractores de manera contundente

Terelu Campos se ha cansado y responde a aquellos que la llaman diva, soberbia y egocéntrica

Terelu Campos lleva unas semanas bastante ajetreadas en las que se ha tenido que enfrentar al que fuese su compañero y amigo de Sálvame,  Kiko Hernández,  y a numerosas acusaciones en su contra.

Entre otras cosas, a la hija de María Teresa Campos la han acusado de ser una diva, soberbia y egocéntrica. Al parecer, Terelu se ha ganado muy mala fama en Málaga, donde ha veraneado.

Y es que hay numerosos testimonios de malagueños y turistas de la zona que afirman que la colaboradora llega a los sitios "como si fuera una diosa". Así, la tildan de "maleducada", "malhablada": "Tiene fama de llegar a los sitios y echar a la gente".

Unas dolorosas afirmaciones ante las que la madre de  Alejandra Rubio no se ha quedado cruzada de brazos, sino que ha decidido responder en su blog de Lecturas.

"Este verano he saboreado cada minuto que he estado con mi gente y también de la tranquilidad de tumbarme a descansar viendo el mar", comienza explicando. "Algo que no podré volver a hacer hasta que pueda volver aquí dentro de un año".

Terelu Campos habla sobre su supuesta 'mala reputación' en Málaga

A continuación, la televisiva entra al grano y se mete de lleno en la polémica que lleva protagonizando estos últimos días.

"Se me ha difamado en un programa de televisión diciendo que yo me he permitido llegar a un sitio de copas conocido en Málaga y echar a unas personas de una mesa", alegaba. "Además de insultar al camarero".

Lo cierto es que la persona que se atrevió a acusarla de realizar dichos actos decidía permanecer en el anonimato. Pero, ¿cómo se desarrolló la historia dentro del local?

Al parecer, Campos llegó a uno de sus chiringuitos favoritos dispuesta a tomar algo, pero se encontró con la desagradable sorpresa de que no había espacio. En ese momento, entra en colera, y comienza a enzarzarse en una fuerte discusión con un comensal al que le exige que le ceda la mesa que ella siempre suele ocupar. 

"Mi mesa, hijo de...", aseguran que llegó a decirle de muy malas maneras. Unas acusaciones de las que ya se defendía este mismo fin de semana en Viva la vida.

"Qué poca vergüenza tienen algunas personas escudadas en el anonimato. Evidentemente es absolutamente falso. Llevo yendo a ese local años porque me gusta estar allí, tomarme una copita con unos amigos después de cenar".

En su blog, Terelu cuenta que mantiene muy buena relación con la gente del establecimiento en cuestión. Algo, con lo que su detractor no contaba.

"Esa persona no tiene ni idea de la buena relación que tengo con los trabajadores de ese local. Jamás he faltado al respeto en mi vida", ha señalado. "No es mi forma de ser, ni se me pasan esas cosas por la imaginación".

Además, ha añadido que cuando se siente a gusto en un sitio siempre suele volver, por lo que ese local se ha convertido en uno de sus favoritos en Málaga. Eso, sumado a que le encanta estrechar lazos con los trabajadores que la atienden.

"Quiero dejar claro que soy muy de costumbres y me gusta, cuando voy a un sitio y me siento a gusto, volver y conocer el nombre de los camareros". 

"Me gusta que las personas sientan que todos somos importantes en nuestros trabajos y merecemos un respeto", destaca. 

¡"Ya estoy muy cansada de esos adjetivos con los que no me identifico ni de lejos!", ha zanjado molesta. 

"Hay muchas veces que digo: «Oye, tía, sé soberbia, sé diva, sé una estúpida, para que al menos hablen con razón». Por mucho que quisiera ser así no va en mi condición. Lo peor es cuando viene de alguien que se hace llamar tu amigo". 

Eso hace sospechar que Terelu tiene muy claro quien es la persona que ha querido desprestigiarla.